martes, 27 de enero de 2009

aun queda un resquicio de mi desquicio

En este preciso instante,
despues de cerrar los ojos,
los abri subitamente.
Tan solo falto que una lagrima rocie mi mejilla;
ya que un destello surco mi blanca mente,
y aquella insana sensacion de elocuencia,
por un instante dio paso a la locura,
fue como un golpe de vida,
como una lugubre sonrisa.
que dio cabida a un segundo de algarabia,
segundo que se torno sinuoso,
sinuosidad que remecio el espacio.
En tanto dicho espacio se incorporo a mi alegria
y entonces la alegria fue incontenible,
ya que surco mi mente,
y con permiso del espacio
inundo mi cuerpo y colapso el mundo.
se que fue una locura,
se que fue un sueño.
y ahora reniego por ello,
pero me consuelo
pensando que aun queda un resquicio de mi desquicio